Fuente: Oficina de Información y Prensa Cámara de Representantes.

Pese a que el proceso de paz culminó en 2016 tras 4 años de duración, la representante a la Cámara Margarita María Restrepo, denuncia que, mientras trascurrían las negociaciones en la Habana, hubo 1.458 menores de edad reclutados por las FARC.

De acuerdo con la representante esta cifra refleja la indiferencia que hubo frente al delito de reclutamiento. “El Gobierno nacional en primer lugar nunca se debió haber sentado a negociar ni en la Habana ni en Ecuador sin antes exigir que devolvieran la totalidad de los niños y que no se reclutara más. El proceso de paz ya pasó, sí, pero en ningún momento se puede dar impunidad frente a los delitos de lesa humanidad cometidos contra los niños” afirma.

Frente a la primera infancia Margarita Restrepo hace énfasis en que se debe garantizar a los menores de edad la seguridad y el derecho al libre desarrollo. Afirma que “según la ONU, un Estado que no es capaz de garantizar la seguridad del libre desarrollo de sus niños no es un Estado viable”.

Datos arrojados por la representante afirman que Colombia es el país con la 2da infancia más maltratada y el único en el continente que “tiene la vergüenza de que en su territorio se recluten niños”.

Lo anterior destaca la necesidad de intervenir en las problemáticas que afectan de forma directa a la población infantil. Esto a fin de culminar con una línea eterna de violencia que quebranta los derechos de los más vulnerables.

Finalmente, la representante destaca que su labor estará encaminada a brindar a los niños su derecho a una educación digna, una alimentación adecuada y a erradicar el delito de reclutamiento en Colombia.

“No voy a descansar hasta que todos los grupos armados al margen de la ley hayan entregado la totalidad de los niños que tienen en sus manos, no voy a descansar hasta que en Colombia se erradique el delito de reclutamiento. No quiero que haya ni un solo niño en la guerra. Yo pienso que es un reto muy grande el que tenemos y del que todos los días somos testigos; de cómo se presenta una crisis de valores, una crisis de familia y una crisis social. Pero esto tiene respuestas y soluciones en nuestra juventud y nuestra infancia” concluyó la representante.