• La iniciativa del congresista Erasmo Zuleta fue aprobada en cuarto debate y sería Ley de la República una vez sea sancionada por el presidente.
• La principal pretensión de esta propuesta es que los fondos de pensiones privados tengan que invertir un mínimo del 3 % en el tejido empresarial colombiano, garantizando 9.6 billones de pesos en empresas o proyectos productivos diferentes al sector financiero y generando más de 320 mil empleos formales y directos en el país.
• La proporción de inversiones de los fondos de pensiones en emisores nacionales ha caído de un 84% para 2012 a un 53% a abril de 2021, mientras que las inversiones en el exterior han ascendido de un 13% a un 46% en el mismo periodo de tiempo.

Bogotá, 18 de junio 2021

Colombianos y emprendedores reciben una noticia positiva que reactiva la economía del país, y que no solo genera más de 160 mil nuevos empleos formales, sino que también fortalece el tejido empresarial con una inversión proveniente de los fondos privados de pensión de mínimo 3%, garantizando así 9.6 billones de pesos para las empresas o proyectos productivos nacionales y no 4.4 billones que corresponden a la inversión actual.

“En estos momentos que vive nuestro país es cuando mayor apoyo deben recibir nuestros emprendedores y empresarios colombianos, además de ser una inversión rentable para quienes cotizamos en los fondos privados de pensiones”, manifestó en su intervención ante la plenaria del Senado el representante cordobés Erasmo Zuleta.

Los fondos privados de pensión a hoy, administran 320 billones de pesos de personas que cotizan en los mismos. Según el representante, “Lo particular de esto es que 148 billones de pesos se están yendo a fortalecer las empresas y gobiernos del extranjero, otros 56 billones se están quedando en el sector financiero colombiano, en los bancos, y 107 billones en títulos de deuda pública. Tan solo 4.4 billones en el resto de empresas colombianas que rentan mejor que la deuda pública y que el mercado accionario nacional”.

Con esta iniciativa aprobada se modificaría el régimen de inversión de los fondos privados de pensión, de tal forma que una proporción muy pequeña de los mismos se tenga que invertir en el país generando empleo, riqueza e incrementando la inversión nacional, lo que traerá consigo una mayor competitividad.

Este espaldarazo a las empresas colombianas y a los ahorradores de los fondos de pensiones, se constituye así en una fuente de financiación adicional y alternativa al sector bancario tradicional donde persisten innumerables falencias en términos de elevados costos de financiación, competencia y dificultades de acceso a financiamiento.

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